Cerca de 1.500 personas   recorrieron  ayer las calles de Oviedo para mostrar su rechazo al inaceptable recorte social de 790.847,92 euros que afecta a trescientos proyectos sociales desarrollados por más de 150 entidades del ámbito social implicadas en la labor de conseguir una Asturias más diversa, equitativa, justa e inclusiva.

El acto sirvió como colofón a la intensa campaña que la plataforma #AsturiasSinRecortes, formada por las entidades del Tercer Sector en Asturias, desarrolló durante el mes de agosto a través de redes sociales, recogida de firmas en  change.org, etc.

La cadena humana recorrió los 800 metros que separan la Junta General del Principado de la  Consejería de Derechos Sociales y Bienestar portando globos blancos y pancartas, mientras coreaba proclamas como  “Servicios Sociales, Somos Esenciales, o   «Alta traición, gobierno de Barbón.»

Antes de comenzar el recorrido, los representantes  de la mesa del Tercer Sector, hicieron entrega del manifiesto a diputados y diputadas de todas las formaciones políticas, a  excepción de Vox, que no acudió a recibirlo.

Se les trasladó que es necesario una colaboración entre las entidades del Tercer Sector y el Gobierno del Principado, un trabajo conjunto para reordenar y reorganizar la atención a los más vulnerables, pues hasta ahora hemos hecho MAS con MENOS pero ya no podemos seguir así. Una vez que ha llegado el COVID-19 hemos de hacer MAS con MÁS. En esta situación extraordinaria se necesitan medidas extraordinarias, como un Fondo de Contingencia Extraordinario pero en ningún caso la desaparición de subvenciones dirigidas a proyectos sociales.

El presidente de la Mesa del Tercer Sector y del Secretariado Gitano Asturias, Víctor García  Ordás, denunció  «el recorte de dos millones de euros en tres años,  lo cual significa la retirada total de presupuesto del Principado para las organizaciones sociales asturianas», En concreto, la medida supone la desaparición inmediata de «cinco líneas de financiación para proyectos de inclusión social, discapacidad, infancia, mayores y voluntariado».

Mónica Oviedo, vicepresidenta de la Mesa y Presidenta del CERMI Asturias declaró que “En un año de CONFINAMIENTO, desescalada, NUEVA NORMALIDAD y crisis sanitaria, donde los más vulnerables necesitan más apoyo que nunca, no se debería realizar ningún tipo de recorte en INVERSION SOCIAL. Pedimos que se reconsidere la decisión, pues la atención a muchas personas con discapacidad y sus familias depende de ello”

La manifestación finalizó con la lectura de un manifiesto y los testimonios de varios asistentes, que describieron en primera persona los numerosos y graves perjuicios que los recortes supondrían para muchas personas con necesidades muy diversas (niños/as con cardiopatías congénitas y sus familias, el voluntariado que fomenta la participación y la solidaridad ciudadana, demostrada con creces durante la pandemia, menores en riesgo de exclusión y jóvenes atendidos en sus barrios) que se verían seriamente afectadas por el desmantelamiento de los más de 300 proyectos sociales  afectados por  esta decisión, que esperamos encarecidamente que  se vuelva a replantear por la Consejera y el Gobierno de Asturias.