Con motivo del Día Internacional de las Familias, que se celebra mañana, la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) quiere destacar el apoyo fundamental que estas suponen para las personas con discapacidad, teniendo en cuenta que, a día de hoy, la Administración Publica no cubre las medidas de apoyo necesarias que tiene este grupo social.

Así lo demuestra el ‘Informe Discapacidad y Familia’, publicado por la Fundación Adecco, que revela que, en la actualidad, se contabilizan 107.100 personas que están inactivas por no poder costear los servicios adecuados para el cuidado de personas adultas con una enfermedad o con discapacidad. Esto supone un aumento del 44,1% con respecto a la cifra registrada en 2012.

“Cuidar de un familiar en situación de dependencia supone un trabajo de 24 horas al día, los 365 días del año. Prácticamente, te obliga a dejar todo lo que hacías para proporcionar estos cuidados y gran parte de estas personas se encuentran con una enorme falta de apoyo, siendo en su gran mayoría mujeres, lo que acentúa la discriminación por razón de género” destaca el presidente de COCEMFE, Anxo Queiruga.

En este sentido, Queiruga explica que “quienes cuidan de familiares necesitan apoyos extra, algunos de ellos deben ser desarrollados por profesionales como la logopedia, la rehabilitación funcional o las terapias ocupacionales; mientras que otros se refieren a la necesidad de disponer de recursos económicos y de su propio tiempo, un respiro”.

COCEMFE apuesta por el impulso de medidas de acción positiva para que sea posible  conciliar la vida laboral y personal y se compensen los costes extraordinarios y esfuerzo diario de familiares cuidadores/as de personas con discapacidad en situación de dependencia.

Entre estas medidas se encuentra también la regulación de la figura de la asistencia personal, ya que viene demostrando, en los ámbitos en que se ha desarrollado, que es un elemento fundamental para que las personas con discapacidad y necesidad de apoyos continuados puedan diseñar, en cierta medida, su modelo de vida.

En opinión de Queiruga, “la asistencia personal significa ese paso diferencial respecto a lo que puede ser la ayuda a domicilio o la figura de la persona cuidadora” y por ello considera que “es fundamental la puesta en marcha de una vez por todas de la asistencia personal con la intensidad y cuantía económica necesarias”.

Afortunadamente, muchas veces donde no llegan las administraciones se encuentran las asociaciones y sus recursos. “Desde el movimiento asociativo hacemos una labor fundamental de apoyo a las personas con discapacidad y sus familias, dando cobertura en diferentes servicios y asesoramiento”, concluye.