El CERMI Asturias ha trasladado su malestar a la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Principado tras haber anunciado que la puesta en marcha de la Acción Concertada sufra un nuevo retraso, posponiendo su puesta en marcha para el próximo día 1 de septiembre.

En la negociación de esta Acción Concertada colaboró CERMI Asturias con esta Consejería, junto a otras entidades del Tercer Sector, en la revisión y realización de aportaciones a toda la documentación relativa a la misma.

Además, insiste en que el ajuste del PVP Plaza de las plazas concertadas, negociado por parte de las entidades con la Consejería, “sea aplicado con carácter retroactivo a 1 de enero del presente año para evitar las pérdidas que de manera continuada se vienen padeciendo año tras año por parte de las entidades que gestionan dichas plazas”, ya que “entendemos que el objetivo de la acción concertada no es tener pérdidas, ni por supuesto ganar dinero, sino abonar el gasto real del servicio según los precios de cada momento, resalta el Comité.
 
El CERMI Asturias representa a más de 20.000 personas con algún tipo de discapacidad y sus familias, y más de 2.000 trabajadores (de los cuales, más del 50% tiene algún tipo de discapacidad).
 
En este sentido, indica que “con nuestro trabajo, se busca conseguir la participación plena de las personas con discapacidad, en la vida social de la Comunidad Autónoma del Principado de Asturias; que cada persona tenga los apoyos que necesita, y una vida de la forma más independiente posible, una vida digna”.
 
Así, el CERMI autonómico lamenta tener que seguir trasladando la precaria situación que siguen atravesando muchas asociaciones, federaciones y plataformas que representan y trabajan por y para las personas con discapacidad y sus familias.

La discapacidad no está siendo “tenida en cuenta” en Asturias (el 10,3% de la población tiene algún tipo de discapacidad reconocida) y es ahora “más vulnerable” a consecuencia de la pandemia.

Por ello, el Comité manifiesta su “preocupación e indignación” ante la “asfixia económica” que están atravesando las entidades que prestan servicios de carácter asistencial para personas con discapacidad (centros de día, centros de apoyo a la integración, residencias, viviendas tuteladas...) concertados con la administración (Acuerdo Marco), y que son servicios calificados como “esenciales” durante la pandemia y que actualmente son “deficitarios” para las entidades de la discapacidad que los gestionan, mientras se continúe con los pvp del acuerdo marco.
 
Por parte de varias de las entidades de CERMI Asturias, se gestionan un total de 1.000 plazas en centros convivenciales del Principado (Centros de Día, Centros de Apoyo a la Integración, Viviendas tuteladas, entre otros).
 
“Para que la actividad del movimiento asociativo de la discapacidad en Asturias pueda continuar trabajando con calidad y con cierta estabilidad, necesitamos un mínimo de coordinación continuada con la Administración, al más alto nivel, una estabilidad y seguridad”, subraya.